
Atrévete a romper tus miedos. Mi reto es ayudarte hoy. Si desde la niñez tienes trabas para continuar porque te han instalado cables que hoy ya no funcionan con tu vida, en especial si nada ha cambiado en diez, veinte años.
Es momento de detenerte a pensar en ello, hacerlo te hará más consciente, escríbelo ahorita mismo en un cuaderno especial.
¿Cuál es tu peor miedo?
No te deprimas por lo que escribas. Salte a dar un paseo, suda un poco. Cuando regreses, tendrás una respuesta de cómo puedes resolver ese miedo.
Medita. 5 minutos es mejor que nada.
La razón por la que muchas veces no superamos nuestros traumas y andamos por la vida tristes, con energía baja. Es porque no queremos reconocer esos miedos.
¿Sabes qué?
Una vez que te das cuenta el universo mismo, empezará a enviar señales o pistas, para que tomes el camino de sanación y mejora. No es casualidad que te encuentres leyendo justo ahora mi post.
Este pequeño trabajo personal te dará muchas respuestas. Así que confía en tu propio proceso. El que pide recibe.
Entonces, ¿qué esperas? Hazlo y me cuentas.
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